En 2023, la maquilladora Cecilia Katz atravesó el año más devastador de su vida: su papá falleció repentinamente y, después de varios meses de agonía, su pareja murió producto de un cáncer. Cómo cambió su percepción acerca de la muerte y la lección que le dejó su compañero en una de las últimas charlas
“La vida cambia deprisa. La vida cambia en un instante. Te sientas a cenar y la vida que conocías se acaba”, escribió la reconocida escritora y periodista estadounidense, Joan Didion, tras la muerte repentina de su marido en diciembre de 2003. Un año y diez meses después, en octubre de 2005, publicó El año del pensamiento mágico, la crónica del duelo que la hizo mundialmente famosa. Meses antes de que el libro saliera a la venta, falleció su única hija, Quintana, de 39 años.
Cecilia Katz sabe exactamente qué significan esas palabras de Didion. En 2023, la vida que conocía se desmoronó en cuatro meses: en abril perdió a su padre por infarto y, en agosto, un cáncer de páncreas se llevó a su esposo.
Un noviazgo corto y un reencuentro
Cecilia Katz (49) y Christian Kurt Mutscheller (52) se conocieron en 1995 cuando coincidieron en la pista de un boliche llamado Bonita. Él la sacó a bailar, ella le dijo que no, él insistió y, unas horas más tarde, sellaron la noche con un beso. Aquel encuentro fue el inicio de un noviazgo intenso, pero que solo duró seis meses. Sin embargo, cinco años después, el destino los reunió nuevamente. “Yo había estado en Canadá, a punto de casarme. Por suerte no pasó y volví. Al tiempito me llegó un mail larguísimo de Chris en el que me decía que nunca había podido sacarme de su cabeza. Arrancamos a salir de nuevo y, en 2001, nos fuimos a vivir juntos”, cuenta Cecilia.
Por entonces, Chris trabajaba en un cibercafé y ella lo ayudaba. Todo fluía hasta que, un día, les desvalijaron el local. “Nos quedamos sin nada”, recuerda Cecilia. Reconstruirse desde cero les llevó años. En el medio fundaron CKM Group, que comenzó como una empresa de organización de eventos y arreglos florales, pero más tarde evolucionó en una marca de maquillaje vegana y cruelty free. “Yo era la cara visible y él se ocupaba del detrás de escena. Funcionábamos como un equipo”, dice ella.
En 2011, después de una década de convivencia, Cecilia y Chris se casaron. Los anillos llevaban una inscripción simbólica: “2/7/2011+10”, en honor a los años compartidos antes de su boda. A partir de ese momento, cuenta ahora ella, rompieron la “mala racha” económica y empezaron a viajar. “Fuimos desde Vancouver hasta Perú, pasando por Hawái, Miami y Orlando. Muchos lugares de Estados Unidos, porque teníamos amigos allá”, dice. En uno de esos viajes, a fines de 2022, Chris sufrió un episodio de malestar grave mientras estaban en un crucero y terminó encerrado en el camarote a causa de vómitos incesantes.